¡Buenos días!
Si hace dos días os contaba mi participación en la Trekorientación de Poblet hoy voy a haceros lo mismo pero con mi primer medio maratón oficial. Fue ayer, participé en el Medio Maratón de Lleida. A ser sinceros no participé por gusto, si hubiese sido por mí no lo hubiera hecho, ya que la rodilla aún no estaba preparada para correr 21km, sino que formaba parte de una asignatura de Inefc y tenía que participar sí o sí. Pero bueno, tocaba hacerlo y aunque mi condición no era la mejor di de mí todo lo que pude.
A las 9:30 fui al lugar de salida y estuve calentando hasta las 9:50 en la que todos los corredores fuimos poniéndonos en los cajones correspondientes, yo en el segundo, el de entre 1h25' y 1h35'. Estaba nervioso ya que era la primera vez que participaba en una carrera así y yo en cualquier competición me pongo a mil aunque sepa que no voy a hacer nada. Aún así los nervios estaban a flor de piel y las dudas me inundaban: "¿Podré terminar la carrera?" "Anda que si no lo consigo y tengo que abandonar." Y lo que peor llevaba: "¿Me aguantará la rodilla?"
Una cosa tenía clara, no forzar lo más mínimo, cómo me comenzara a doler... a bajar el ritmo y si era necesario a andar. Medias Maratones hay muchas, rodillas tengo dos y una de ellas algo tocada.
Teniendo esto claro me puse los cascos, le di al play y a disfrutar de lo que me esperaba por delante. Mi objetivo si me notaba bien: hacer la carrera en 1h30'. Que no: acabarla.
Tras el pistoletazo empecé a correr, me esperaban 21km por delante. Al principio iba andando, había mil corredores y el tapón que se formó como entenderéis fue grande. Y no fue hasta pasados 20 segundos no pude empezar a correr con normalidad. Poco a poco fui adaptando el ritmo, buscando el más cómodo posible y que me permitiera llevarlo durante todo el recorrido. Pasé por el km 1 en menos de 4 minutos. "Afloja Pablito o pagarás las consecuencias". Imposible hacerlo. Del km 1 al 2 era todo bajada, por lo que embalarse era lo normal, pero superada la bajada y empezar lo llano me puse a correr a 4:20. "Así mejor".
Fueron pasando los kilómetros y me sentía bien. Había cogido el ritmo adecuado y lo seguí bien. Veía la liebre con el globo de 1h24' a unos 30 metros. No tenía la más mínima intención de atraparlos y sabía que a ese ritmo lo que tenía que pasar era que se fueran alejando progresivamente, y así sucedió. Llegué al primer avituallamiento, donde me enjuagué la boca y di un pequeño trago de agua, que más que un trago fue humedecerme los labios.
Proseguí con la carrera. La gente se volcaba con los corredores y los ánimos no cesaban. Había quienes miraban con cara de asombro, otros aplaudían y gritaban, y los más pequeños alargaban las manos para conseguir la palmada de algún que otro corredor/a. Llego al km 10 y miro el reloj de nuevo. "42 minutos, no está mal, buen ritmo. Aunque no te emociones que quedan otros 10!". Me doy cuenta que llevo un rato corriendo al lado de un hombre y me pego a él (cosa que duró hasta el km 20). Sin dudarlo le doy ánimos y me pongo a hablar un poco sobre la carrera, qué tal va y si se encuentra bien. Dialogamos durante un par de calles y seguimos a lo nuestro. Unas palabras de vez en cuando si veía que flojeaba y listos, a seguir.
En el km 13 nos cruzamos con el primero. ¡Menudo máquina! ¡El pasaba por el km 18 ya! En fin, esta gente es de otro mundo. Le aplaudimos y nos levanta la mano. Bonito gesto, me gusta esa actitud de compañerismo. Sigo avanzando y paso por el km 14 en 1 hora clavada. A partir de ahí el tramo fue bastante feo y nada agradable, todo polígono industrial, pero que le vamos a hacer. Y es un poco antes de llegar al km 15 donde empiezo a notar que la rodilla no va cómoda. "Mierda, ya empezamos". Sigo a lo mío y busco alguna canción que me motive y que haga que esa parte se me haga más amena. Tras 5 km más conseguimos salir de ahí y volvemos a adentrarnos a la ciudad. ¡Sólo quedan 2 km!
Me empiezo a mentalizar de que a lo mejor toca apretar un poco. ¿Podré? Esa es la pregunta que me inunda hasta el km 20. Tras un par de intentos de darle algo más duro me doy cuenta que no. "Será mejor reservarse para los últimos metros" - pienso. Así que sigo con el grupito que me he juntado, entre quienes está la liebre de 1h30'. "Este es tu sitio Pablo, vamos va joder, que no queda nada! Síguelos y en el sprint les fundes. ¡Va, va, va!". Me autoanimo y consigo ir a su ritmo. La rodilla se está quejando pero llegados a ese punto no pienso rendirme. "Demasiado he aminorado el ritmo ya como para seguir disminuyéndolo". No, en ese punto tocaba sufrir y aguantarse. Y así lo hago.
Llego a los últimos 500 metros y veo que llevo 1h29' con algo. Sigo un poco más y a falta de 200m empiezo a esprintar. Adelanto a unos 6 corredores y... fin. Miro el reloj y lo he parado en 01:30:52. Conseguido! Mi objetivo de hacer el medio maratón en 1h30' lo he logrado. Descanso, me tomo un Aquarius, una manzana y un poco de coca. Voy charlando con mis amigos que van llegando y comentamos la carrera. Todos están contentos con haber logrado hacerlo. Me doy un paseo y al cabo de un rato a casa y a la ducha.
No sé que tendrá ese lugar pero es entrar y empiezan las reflexiones. "¿Habré hecho bien en ir a ese ritmo? ¿Qué tal me levantaré mañana? ¿Qué tengo en la rodilla?" En fin, demasiadas, pero ahora toca descansar, comer y volver a descansar. La tarde... lo reconozco, fue de perro total, jajaja, pero no estaba para muchos trotes. Ahora toca recuperar la rodilla y que vuelva a estar en perfecto estado, así que se acabaron los entrenamientos de correr durante una temporada. Las lesiones hay que curárselas bien que sino luego van a peor.
Esto ha sido todo amigos/as. Espero que vuestro puente fuera genial. Un abrazo, salud y km's! :)
Pd: gracias a todos los que animasteis y que siempre estáis cuando os necesito. Se os quiere!
- Minutos antes del calentamiento y de la salida -
- Km 1'5, aún íbamos todos frescos, jejeje -
- Llegando al km 4 -
- Pasando por el 7 -
- ¡Últimas zancadas y fin! -
- Clasificación -
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